LA LEYENDA DEL REY CONDOY, REY DE LOS MIXES
El pasado mixe, nos deja la siguiente historia. Se cuenta
que una pareja fue en busca de leña para llevar a su casa, y en su camino
encontraron una cueva, entraron a ella en donde descubrieron dos enormes
huevos, y decidieron llevarlos a su casa, con mucho esfuerzo lograron
desenterrarlos y transportarlos a su hogar pero lo lograron. Pasaron tres días
y los dos huevos reventaron, de uno de ellos salió un niño (condoy), y del
segundo salió una serpiente de siete cabezas, y que era hermana del niño.
Condoy creció sumamente rápido, tanto, que al
tercer día de haber nacido ya era un hombre y comía muchísimo, y su mamá le
daba en canastos enormes, que él dejaba vacíos casi de inmediato.
Condoy realizó viajes a muchos lugares tan lejanos como
Tehuantepec, en Oaxaca, y siempre le pretextaba a su mamá que quería conocer
lugares, y por supuesto que su mamá se quedaba preocupada. Sus viajes, aunque
largos, no duraban más que un día, y siempre regresaba con bultos de cosas y
ollas con dinero. Un dia, cuando regresó de uno de sus viajes, le entregó a su
madre una gran olla repleta de dinero, le agradeció los cuidados durante tanto
tiempo, se despidió de ella y le comunicó que iba a seguir viajando y
conociendo más y más lugares.
Así comenzó un largo viaje por muchos lugares
buscando dinero y conocimientos para mejorar su región mixe, que cabe
mencionar, lo habían nombrado su rey. Se cuenta que Condoy robaba a los ricos
de Oaxaca, quitándoles ganado y dinero para llevarlo a su pueblo. Una de las características
de Condoy, es que siempre estuvo al frente de su pueblo defendiéndolo de los
ataques de otras regiones, y su escondite era la parte más alta del cerro del
Zempoaltepetl. En su condición divina, a Condoy, le rebotaban las flechas y no
sufría daño alguno, y con su fuerza descomunal aventaba enormes piedras a sus
enemigos causándoles grandes pérdidas humanas. Además, enseñó a su pueblo a
pelear y defenderse, a sembrar, a trabajar, y arregló la región Mixe como él
quiso y a su gusto.
Un día tomó camino rumbo a Mitla, para construir su
palacio, ya que se había enterado que otro rey iba a construir una ciudad en
ese lugar, y trabajaba hasta de noche, pero al escuchar el canto de un gallo se
asustó y detuvo sus labores, desde entonces, la gente cree que esos palacios
inacabados, son las ruinas de Mitla.
Al salir de Mitla se dirigió a Oaxaca, al pasar por
el lugar conocido actualmente como EL TULE, se sentó a descansar y clavó su
báculo, que pesaba 62kg. En la tierra, y de inmediato el bastón comenzó a
retoñar, de esa manera creció el árbol más grande del mundo, y se le conoce
como EL ARBOL DEL TULE, y se cuenta, que el día que se seque el mencionado
árbol, ese mismo día Condoy habrá muerto.
Ahí se encontraba Condoy descansando, cuando a su
hermana le surgió la idea de saber de él, entonces le comunicó a su madre que
iría a buscarlo para saber qué es lo que estaba haciendo.
Entonces la serpiente salió en dirección hacia
Oaxaca metiéndose en la tierra con truenos, lluvias y vientos, la tierra
temblaba y se producían derrumbes lo que hacía un panorama espantoso. Al pasar
por el pueblo de Coatlán, encontró la tierra muy blanda y dejó unas profundas
huellas, y casi al llegar al pueblo de Nejapa de Madero, un cura la maldijo y
allí quedó la serpiente convertida en piedra. El rey Condoy dejó su anillo
oculto en algún lugar de Oaxaca, y se regresó al cerro del Zempoaltepetl, y en
ese lugar se quedó para siempre, y en donde la personas Mixes pueden hablar con
él pero no verlo. Condoy sigue vivo ayudando y apoyando a su región y permanece
en los corazones de su pueblo. Es la razón por la que el pueblo se hace llamar
con orgullo LOS JAMÄS VENCIDOS.
Actualmente condoy es adorado por los mixes como un
dios, y a la cima del cerro del Zempoaltepetl, casi a diario, la gente lleva
diversas ofrendas y sacrificios por motivos diferentes, para pedir buena
cosecha, por dinero, por ganado, por mejorar su forma de vida, etcétera, una
gran cantidad de peticiones, aunque las ofrendas y sacrificios más grandes e
importantes son a principio de año.
Son días de gran fiesta y algarabía, en donde
participan todos, mujeres, hombres, niños, adultos, hay música, baile, en fin,
una grandiosa fiesta. Hay quienes dicen haber visto a Condoy, pero nadie lo
puede asegurar, ya que existen innumerables cuevas donde se cuenta que camina
Condoy para no ser visto. Además se cuenta de tesoros que nadie ha podido
encontrar.
Finalmente, los mixes sienten que el mejor tesoro
que les heredó Condoy, es su existencia, su enseñanza y su bondad. Asi lo
cuenta el pueblo Ayuujk.